Si en nuestras tiendas hay un rey auténtico durante el periodo navideño, éste es el Roscón de Reyes… evidentemente, ¡sin gluten!
Este tradicional bollo agujereado y relleno de mazapán, natas o cremas y con sus sorpresas interiores que captan el interés y todos los sentidos de pequeños y mayores, esconde mucho más que un muñeco de cerámica o una legumbre otoñal seca, ya que existe una larga historia que nada tiene que ver con los Reyes Magos o con ninguna de las fiestas asociadas al cristianismo aunque sean las que actualmente copan las mesas, especialmente en el periodo de la Navidad.
Dicha historia se remonta a la época gloriosa del imperio romano y poco tiene de glamurosa, ¡todo lo contrario! Se asocia precisamente a la Fiesta de los Esclavos, que tenía lugar en el último mes del año para celebrar que se estaba a las puertas de un nuevo período de luz y se terminaba otro círculo de duro trabajo en cualquiera de los escenarios que éstos se encontraran. Ese ciclo era conocido como Las Saturnales o “el renacimiento” del año; tenía lugar cuando se cumplía el solsticio de invierno, que en el calendario juliano -que rigió el imperio y en Europa durante muchos siglos- se celebraba curiosamente el 25 de diciembre.
En un inicio se elaboraban artesanalmente unas tortas redondas, en las que se incluían productos de la tierra y de la época, como los higos, y los dátiles, regados con miel. Cómo deferencia a ese fin de ciclo, las tortas se repartían entre todos los trabajadores en forma de premio por el trabajo bien hecho durante los meses anteriores. En su evolución ya se introdujo la tradición de esconder en el rosco un haba seca dado que era un símbolo de la prosperidad.
Y si hoy en día a todos nos gusta encontrar ese rey en el trozo de roscón que nos toca el 5 o el 6 de diciembre, aquellos esclavos eran deseosos del haba, ya que el afortunado que le tocaba conseguía un pase directo a la libertad durante el tiempo establecido de Las Saturnales, y era nombrado ‘rey de reyes’.
Esclavos también de la enfermedad celíaca, en 0% Gluten todas las personas que la padecen pueden gozar de nuestro Roscón ‘rey de reyes’, pensado para todos los comensales, tanto por su sabor e ingredientes seleccionados, como por esa estética ya tan típica en cada mesa que facilita que el Día de Reyes sea muy especial.